5 tips para una parrillada perfecta
En el mundo de los asados a la parrilla cada detalle cuenta. Por eso, vamos a compartirte algunos consejos de experto de asado que son indispensables para que en tus asados todo salga a pedir de boca.
Así que si quieres demostrar a tus amigos o familiares que eres el Rey de las Parrilladas, debes asegurarte de contar con todo lo necesario para ofrecerles una experiencia inolvidable en cada carnita asada.
1. Preparación para el asado
Cada asado es más que un solo espacio de convivencia: también es todo un ritual en el que, además de preparar los mejores cortes finos al carbón, se necesita tener un ambiente perfecto para todos los convidados.
La limpieza de la parrilla es un aspecto indispensable para lograrlo no sólo por su apariencia, sino también para preservar la seguridad de los alimentos. ¡No querrás que nadie se enferme con tus asados!
Un consejo clásico recomienda frotar la parrilla con una cebolla partida en dos antes de encender el fuego y, aunque es una buena recomendación, no es suficiente.
Para eliminar los restos de asados anteriores, haz una limpieza profunda de la parrilla con un cepillo de cerdas metálicas, lo que te ayudará a eliminar carne y grasa quemadas que pueden ser tóxicas.
2. Accesorios
Tus utensilios de asado deben estar listos y eso, desde luego, incluye que estén limpios y en buenas condiciones, especialmente en lo relativo a los cuchillos.
Existen numerosos accesorios para carnita asada que puedes necesitar, pero si estás iniciándote en las parrilladas, existen tres utensilios indispensables (además del asador, obviamente):
- Cuchillo de cocinero
- Tabla de corte
- Pinza de volteado.
Hay muchos tipos de cuchillos que puedes utilizar en una parrillada, pero el que no puede faltarte es un cuchillo de cocinero o chef en buenas condiciones, sobre todo, bien afilado.
La chaira es un utensilio que puede servirte para mantener el filo de tus cuchillos, ya que puedes utilizarlo como una lima antes y después de cada preparación, pero también puedes optar por otro métodos de afilado, como una piedra de afilado o un esmeril eléctrico.
Tanto para cuidar la hoja del cuchillo como para preservar la seguridad de los alimentos, contar con una tabla de corte de buena calidad es otro de los utensilios que requieres tener a la mano.
En especial, te recomendamos tablas de corte de madera, porque este material ayuda a que el filo del cuchillo se desgaste menos y también mantiene las bacterias que pueda haber en el ambiente lejos de la superficie de corte.
Por último, requerirás unas pinzas al momento de hacer chillar tus cortes en la parrilla. Con ellas, podrás voltear tus cortes finos sin pincharlos, pues hacerlo causará que la carne pierda jugos en exceso, dejándola más seca y con menos sabor.
En relación con las pinzas de cocina, hay dos consejos básicos a tomar en cuenta:
- Al momento de asar, debes utilizarlas para voltear la carne una sola vez, porque si das vueltas al corte una y otra vez, obtendrás un resultado disparejo en cada pieza cárnica.
- Durante el asado, muchas personas prefieren voltear la carne con trinche y cuchillo, pero en un asado es mejor que reserves estos artículos para ayudarte a cortar la carne ya asada y lista para servir.
Desde luego, hay muchos utensilios que puedes necesitar en la carnita asada, como mandiles, espátulas, iniciadores de fuego, sartenes de hierro y más, pero podrás comenzar con los tres que aquí te recomendamos y poco a poco irte haciendo de todos los accesorios que necesites, incluido un kit de asado.
Leer: Cómo elegir tu mandil para asar carne
3. Descongelar la carne
El tiempo es un factor a considerar para una parrillada al carbón, pues aunque este tipo de asado es, sin duda, la mejor opción para enaltecer tus cortes finos, definitivamente no lo vas a resolver en media hora.
Lo primero es descongelar la carne. La mejor forma de hacerlo es sacarla del congelador la noche anterior a tu asado y colocarla en la parte menos fría de tu refrigerador, que es normalmente la bandeja de abajo.
En este proceso, es muy importante que no abras el empaque al alto vacío de tus cortes finos, así es que verifica que ni siquiera se haya rasgado.
Conforme se acerque la hora de tu asado, saca tu carne del refrigerador y espera a que se encuentre a temperatura ambiente antes de prepararla y llevarla al fuego. Si te precipitas, te arriesgas a que tu carne quede más dura.
Leer: Te decimos cómo congelar de nuevo la carne cruda
4. Encender el fuego
Existen muchos tipos de asadores al carbón y cualquiera que sea el tuyo, también debes considerar el tiempo que toma el encendido del fuego.
Lo más importante es que elijas carbón vegetal o briquetas (también de origen vegetal), cuya mayor ventaja será el aroma que aportarán a tus cortes finos y, por esta misma razón, es muy importante que no recurras a combustibles fósiles para encender el fuego más rápido.
Cuando hayas iniciado el fuego, sin duda necesitarás conocer si ya lograste la temperatura correcta. Para verificarlo, simplemente acerca una mano a la parrilla (¡obviamente no la toques!) y cuentes lentamente hasta 10.
Si no resistes los 10 segundos, la temperatura es demasiado alta y puede que necesites retirar algunas brasas encendidas.
5. Preparar el corte
¡Ahora sí! Con tu parrilla limpia, la carne a temperatura adecuada y el fuego en su punto, es momento de salpimentar tus cortes finos. Para hacerlo, y a menos que decidas utilizar un rub, lo básico que vas a necesitar es:
- Aceite de oliva
- Sal de grano
- Pimienta negra molida
- Hierbas o especias de tu preferencia.
En este caso, el aceite no servirá tanto para dar más sabor al corte, sino que funcionará como un adherente para los demás ingredientes de tu preparación.
Sobre el tipo de sal a utilizar para una carne asada, nuestra recomendación es que utilices sal parrillera, pues el grano es un poco mayor al de la sal de mar.
Además, no tienes que preocuparte por salar la carne en exceso, pues éste será eliminado por la grasa derretida de cada corte de carne cocinada a la parrilla. Pero no es el caso de la sal de mesa o fina, que logrará penetrar más en el corte, extrayendo humedad y dejándolo más seco al comer.
Por otro lado, si optaste por aplicar un rub o marinar tus cortes finos, es poco probable que necesites pasar por este proceso de preparación, sobre todo en el caso de ya incluya sal y pimienta.
Bonus: el toque maestro
Ahora que ya conoces los aspectos básicos para asegurar el éxito en tus asados, todo lo que hace falta es poner manos a la obra y ponerte a preparar cortes finos de la mejor calidad.
La buena noticia es que puedes conseguirlos sin necesidad de ir a comprarlos, todo lo que tienes que hacer es dar clic aquí y en CARNICERO MX nos encargamos de llevarlos hasta las puertas de tu casa. ¡Elige de nuestra selección de carnes y embutidos!